Fase expulsiva del parto

Complicaciones de la tercera fase del parto ppt

Sin embargo, la tercera fase es mucho más que un acontecimiento médico. Representa el momento justo después del nacimiento de tu bebé, cuando tu cuerpo deja de estar embarazado y te conviertes en madre. Tu bebé hace la transición a la vida en el mundo exterior. Al igual que en el parto, tu glándula pituitaria libera la hormona oxitocina, que hace que tu útero se contraiga y expulse la placenta en un proceso similar al del nacimiento del bebé. Al igual que en la primera y la segunda fase del parto, este proceso se ve facilitado por un entorno tranquilo y silencioso. Además, la oxitocina aumenta en respuesta a la cercanía con el bebé (especialmente cuando hay contacto piel con piel). Por el contrario, los ambientes llenos de adrenalina pueden frenar la producción de oxitocina.

En la tercera etapa, y poco después, es cuando el potencial de sangrado es mayor. En el tercer mundo, la hemorragia posparto (HPP) sigue siendo la principal causa de muerte de las mujeres en edad fértil. Por supuesto, en Canadá, donde estamos mejor alimentados (es decir, toleramos mejor la pérdida de sangre) y tenemos acceso a medicamentos/cirugía de emergencia, esto no es algo que veamos. Pero incluso en nuestro contexto del primer mundo, la HPP puede tener graves consecuencias, incluida la necesidad de una intervención médica adicional.

Manejo de la tercera etapa del parto pdf

Es posible que te ofrezcan una inyección en el muslo justo cuando nazca el bebé, para acelerar la salida de la placenta. La inyección contiene un fármaco llamado sintocinón (una versión sintética de la hormona oxitocina), que hace que el útero se contraiga y ayuda a prevenir las hemorragias intensas conocidas como «hemorragia posparto».

A tu bebé le gustará estar cerca de ti justo después del parto. El contacto piel con piel es lo mejor, ya que proporciona calor al bebé y le anima a hacer su primera toma. El tiempo a solas con tu pareja y tu bebé puede ser muy especial. La comadrona o el médico examinarán a tu bebé, lo pesarán y posiblemente lo medirán, y le darán unas pulseras de identificación con tu nombre.

Deja que tu bebé tome el pecho lo antes posible tras el nacimiento. Ayuda a la lactancia posterior y también a la contracción del útero. Los bebés empiezan a mamar inmediatamente, aunque tal vez por poco tiempo. Puede que sólo les guste sentir el pezón en la boca.

Te ofrecerán una inyección de vitamina K para tu bebé, que es la forma más eficaz de ayudar a prevenir un raro trastorno hemorrágico (conocido como «enfermedad hemorrágica del recién nacido»). La comadrona lo habrá comentado con usted y habrá pedido su consentimiento.

Cuarta fase del parto

La tercera fase del parto se refiere al periodo que sigue al parto completo del recién nacido hasta el parto completo de la placenta. La duración de la tercera fase y sus complicaciones dependen de la contractilidad uterina y de la duración de la separación de la placenta. La duración normal de la tercera fase tanto en nulíparas como en multíparas es inferior a 30 minutos. Hay pruebas sólidas que apoyan la administración rutinaria de agentes uterotónicos para la prevención de la hemorragia posparto (HPP), con el fin de mejorar la contracción uterina natural en la tercera fase del parto, reduciendo así la aparición de la HPP en un 40%.

Existe una declaración política conjunta entre la Confederación Internacional de Matronas (ICM), la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia (FIGO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), que recomiendan el manejo activo de la tercera etapa del parto para prevenir la HPP. El manejo activo condujo a una reducción de la incidencia de la HPP, de la hemoglobina materna<9g/dL y de la necesidad de transfusión de sangre. (4-7).

Gestión activa de la tercera fase del parto

En general, hay dos opciones para la tercera fase del parto: la gestión activa y la gestión fisiológica. Pero también hay una tercera opción, la gestión mixta, que combina enfoques activos y fisiológicos (Begley et al, 2011; NICE, 2017).

Cuando la placenta esté fuera, tu matrona pinzará y cortará el cordón. Pero si quieres, puedes pedirles que esperen hasta que haya terminado de pulsar (RCM, 2013a). Se ha demostrado que retrasar el pinzamiento del cordón durante al menos un minuto es beneficioso para los bebés(Science Direct, 2021).

En general, se recomienda el manejo activo para todas las mujeres, para evitar hemorragias graves. Aunque esto es más problemático en los países de bajos ingresos, donde es más probable que las mujeres estén mal alimentadas, anémicas o tengan enfermedades infecciosas (Begley et al 2015).

Si la hemorragia continúa, se le administrará más oxitocina, ergometrina u otros fármacos. En algunos casos, podría ser necesario un examen bajo anestesia y una intervención quirúrgica y/o una transfusión de sangre (NICE, 2017).

Si eso te ocurre, tendrán que ponerte un goteo intravenoso. También es posible que te ofrezcan un examen vaginal para ver si necesitas una operación para extraer la placenta. También se te ofrecerá alivio del dolor (NICE, 2017).