Espondiloartritis axial
La espondilitis anquilosante es una causa inflamatoria relativamente infrecuente de dolor de espalda a largo plazo que puede dar lugar a cambios radiográficos en la columna vertebral y las articulaciones sacroilíacas. La espondilitis anquilosante forma parte de un espectro de enfermedades interrelacionadas que se denominan colectivamente espondiloartritis. Los pacientes con espondiloartritis axial tienen síntomas predominantes en la columna vertebral y algunos desarrollan espondilitis anquilosante clásica. La espondiloartritis axial es una enfermedad insidiosa y difícil de diagnosticar; los pacientes tienen un retraso medio de ocho años desde el inicio de los síntomas hasta el diagnóstico. Datos recientes indican que el tratamiento temprano con ejercicio, fisioterapia y tratamientos farmacológicos puede retrasar la progresión de la enfermedad y, por tanto, mejorar los resultados.
Espondiloartropatía Hla-b27
Los artículos de Verywell Health son revisados por médicos certificados y profesionales de la salud. Estos revisores médicos confirman que el contenido es exhaustivo y preciso, y que refleja las últimas investigaciones basadas en la evidencia. El contenido se revisa antes de su publicación y en caso de actualizaciones sustanciales. Más información.
Las espondiloartropatías (espondiloartritis) son un grupo de enfermedades reumáticas inflamatorias (inflamación y deterioro de la función ósea y articular). Existen seis tipos, entre ellos la espondilitis anquilosante y la artritis psoriásica.
El síntoma predominante es el dolor y la inflamación de las articulaciones, que a veces afecta a la columna vertebral. En algunos casos, estas enfermedades pueden volverse sistémicas (en todo el cuerpo), causando inflamación en los ojos, el tracto gastrointestinal y la piel.
La espondilitis anquilosante es un tipo de espondiloartropatía que se caracteriza principalmente por la inflamación crónica de las articulaciones y los ligamentos de la columna vertebral, causando dolor y rigidez. En los casos graves, las vértebras pueden fusionarse (una condición denominada anquilosis), lo que da lugar a una columna vertebral rígida e inflexible. La consecuencia puede ser una postura anormal. Pueden verse afectadas otras articulaciones, como las caderas, las rodillas, los tobillos, el cuello o los hombros. La enfermedad también puede tener efectos sistémicos (que afectan a varios órganos del cuerpo), como fiebre, fatiga e inflamación ocular o intestinal. La afectación del corazón o los pulmones es rara pero posible.
Espondiloartritis periférica
Tratamiento de las espondiloartropatías inflamatoriasConcierte una cita con un consultor reumatólogo profesional para deshacerse de los dolores de espalda causados por las espondiloartropatías inflamatorias. Toque el botón de abajo para rellenar el formulario de contacto.Programe una cita en línea¿Qué es la espondiloartropatía inflamatoria? La espondiloartropatía inflamatoria, también conocida como espondiloartritis, es una enfermedad autoinmune. Se produce cuando el sistema inmunitario ataca la columna vertebral y, a veces, las articulaciones de los brazos y las piernas. Los hombres son los más propensos a padecer espondiloartropatía inflamatoria, sobre todo los más jóvenes en la adolescencia y la veintena.
El rango de edad más común de quienes desarrollan la enfermedad es de 17 a 45 años. Se cree que la genética pone a algunos individuos en riesgo de desarrollar espondiloartropatía inflamatoria. A veces se asocia con la enfermedad inflamatoria intestinal, ya que muchos pacientes presentan síntomas de ambas. La inflamación asociada a la espondiloartropatía puede provocar la destrucción de los huesos, por lo que es importante tratar la enfermedad.Síntomas y causasLos síntomas más comunes de la espondiloartropatía inflamatoria son el dolor lumbar y la hinchazón de brazos y piernas. El dolor puede incluir las caderas y suele empeorar por la mañana o tras un periodo de inactividad. Los pacientes también pueden experimentar rigidez en la columna vertebral u otras articulaciones. Los tendones de los dedos de los pies y de las manos pueden inflamarse.
Espondiloartropatía inflamatoria
La espondilitis anquilosante es una variante de la espondiloartritis que afecta a los adultos jóvenes. En la espondilitis anquilosante, la inflamación de la columna vertebral y las articulaciones sacroilíacas provoca dolor crónico y rigidez en la espalda. Los pacientes con espondiloartritis tienen predominantemente la enfermedad en las articulaciones periféricas y frecuentemente presentan inflamación en los lugares de unión de los tendones y ligamentos a los huesos. Es frecuente la inflamación de dedos enteros de manos y pies, lo que da un aspecto característico de salchicha.
La artritis psoriásica es otra variante de la espondiloartritis. En la artritis psoriásica, la psoriasis de la piel se combina con los rasgos musculoesqueléticos de la espondiloartritis, que suelen afectar a las articulaciones periféricas. La inflamación de los ojos (uveítis) es frecuente en pacientes con espondilitis anquilosante o artritis psoriásica.
Se cree que la espondiloartritis se desarrolla por la interacción de factores genéticos y ambientales. Muchos pacientes con espondiloartritis son positivos al HLA-B27, una variante genética que controla las respuestas inmunitarias. Sin embargo, no hay un solo gen que determine si una persona desarrollará espondiloartritis. Se han identificado muchas otras variantes genéticas que aumentan el riesgo de la enfermedad. La artritis reactiva es un tipo de espondiloartritis que se desarrolla tras una infección del tracto urinario o un episodio de diarrea infecciosa causada por ciertos tipos de bacterias. Se ha planteado la hipótesis de que las bacterias también desempeñan un papel en la espondilitis anquilosante y otras variantes de la espondiloartritis, normalmente sin causar una infección manifiesta. Los pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal (enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa) pueden desarrollar espondiloartritis, lo que sugiere que comparten ciertos mecanismos de la enfermedad. En la actualidad, no entendemos lo suficiente sobre las causas de la espondiloartritis como para poder prevenir la enfermedad.